Los factores y signos de riesgo en la enfermedad del Parkinson son claves para detectarla cuanto antes.
Actualmente no se conoce ninguna causa que pueda originar la enfermedad, pero sí algunos posibles desencadenantes.
El Parkinson es una enfermedad neurodegenerativa crónica. Se relaciona con el deterioro y muerte de las neuronas que producen dopamina. Se manifiesta con temblores incontrolables principalmente, pero hay otros síntomas que pueden ayudar a detectarla antes.
Factores riesgo
El componente genético es uno de los principales factores de riesgo del Parkinson. Si existe algún antecedente familiar de esta enfermedad es necesario que, de tanto en tanto, visites al médico para ver si hay algún indicio de que puedas tenerla también.
La edad y el sexo son otros factores que debemos tener en cuenta. La mayoría de enfermos de Parkinson desarrollan la enfermedad a partir de los 60 años, pero el riesgo aumenta a medida que pasa el tiempo. Los hombres tiene mucho más riesgo a desarrollar la enfermedad que las mujeres.
Las lesiones craneales como traumatismos o golpes repetidos en la cabeza puede causar la aparición de la enfermedad del Parkinson. También ciertos virus y algunos medicamentos relacionados con enfermedades psiquiátricas pueden contribuir a su aparición y desarrollo.
La alimentación se ha visto que también es importante. Tomar productos lácteos bajos en grasa está relacionado con un ligero aumento de riesgo de desarrollo de esta enfermedad.
La exposición a pesticidas, carbono, contaminantes químicos o hierro, el tabaquismo y el consumo de café o de agua de bebedores también pueden infectar a la persona con esta enfermedad mental.
Signos de riesgo
Los signos de riesgo que reflejan si alguien padece de Parkinson pueden ser motores o no motores. Estos aparecen poco a poco y van pasando por varias etapas de evolución.
El paciente puede experimentar signos motores como temblores incontrolables, rigidez corporal, poca coordinación, dificultades para iniciar movimientos y lentitud en las acciones de movimiento.
Otros síntomas que puede experimentar el enfermo son signos no motores. Estos son: depresión, dolor, ansiedad, apatía, fatiga, alucinaciones, psicosis, trastorno de sueño y deterioro cognitivo.
Estos síntomas pueden aparecer por separado y en un largo espacio de tiempo o todos, prácticamente, a la vez.
Resumen de las etapas
- Etapa 0: El paciente no experimenta ningún signo de riesgo visible de la enfermedad
- Etapa 1: Síntomas leves de la enfermedad en los movimientos (suelen darse cuenta los familiares)
- Etapa 2: Los síntomas se extienden por ambas partes del cuerpo, pero aún no afecta al equilibrio
- Etapa 3: Los movimientos cada vez son más lentos y el equilibrio más difícil de mantener, pero aún conservan una gran parte de autonomía. La postura corporal del paciente se inclina hacia adelante
- Etapa 4: El paciente experimenta que los síntomas se agravan. Las tareas cotidianas se vuelven costosas, igual que andar. Empiezan a padecer caídas
- Etapa 5: La persona queda inmóvil y necesita de cuidados las 24 horas del día
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