El trastorno de la alimentación y del sueño en una persona que padece Alzheimer es muy habitual. La edad es el principal factor de riesgo de enfermedades como el Alzheimer, por ello a medida que las personas envejecen son más propensas a sufrir de este padecimiento. Con esta enfermedad también aparecen otros trastornos en la persona mayor y es precisamente por esto que en muchos casos lo más recomendable es contar con un cuidador que pueda prestar un servicio de atención domiciliaria. Dos de los trastornos más comunes que sufren las personas con este tipo de demencia son el trastorno del sueño y el trastorno de la alimentación.
Con el proceso normal de envejecimiento todas las personas sufren alteraciones en estos dos aspectos. Sin embargo, cuando además de la edad también incide otro factor como el Alzheimer, estos padecimientos pueden ser mucho más evidentes. Es importante que el auxiliar de ayuda a domicilio tenga conocimiento sobre el manejo de este tipo de situaciones para que la persona mayor pueda llevar una vida mucho más tranquila y normal dentro de su propia condición de salud. Es por esto que desde Cuideo queremos ofrecerte una guía sobre los cuidados más importantes que deben aplicarse cuando se presentan estos trastornos en la persona de tercera edad.
Recomendaciones a seguir por el cuidador
Cuidar a una persona mayor nunca es un trabajo sencillo. Se necesita no solo paciencia sino también mucha dedicación y empatía. El rol del cuidador de personas mayores con Alzheimer es asistirlo en todo lo que necesita, pero también estar al pendiente de controlar el desarrollo de otro tipo de trastornos. Los dos trastornos más comunes entre las personas con Alzheimer tienen que ver con el sueño y la alimentación. A continuación te mostramos qué pautas seguir en cada uno de estos casos.
· Para el trastorno del sueño
El cuidador de una persona mayor con Alzheimer puede tener complicaciones al momento de hacer que estas vayan a la cama. Lograr que duerman toda la noche no es fácil, ya que por lo general suelen tener el sueño invertido, es decir, que tienen sueño de día y no de noche. Algunos de los síntomas que suelen tener los ancianos con este tipo de demencia son insomnio, agitación nocturna y somnolencia diurna. Para ayudarlos con este trastorno es importante que el cuidador siga ciertas pautas.
Es recomendable que organice alguna actividad física durante el día para que gaste energías. También es ideal que la persona mayor vaya a dormir todos los días a la misma hora para establecer una rutina. La comida en las noches debe ser ligera y no debe ingerir mucho líquido antes de dormir. Otra recomendación es evitar que haga siestas de más de 30 minutos en el día, ya que se alterará más su insomnio. También debe procurar que el dormitorio sea lo más silencioso posible y que incluya luces tenues.
· Para el trastorno de la alimentación
Las personas mayores con Alzheimer también suelen ser problemáticas a la hora de comer. Lograr que coman bien es fundamental para mantener su salud en buen estado, por ello es importante que el cuidador sepa cómo lidiar con este tipo de trastorno. Entre los síntomas que pueden presentar están el aumento o disminución del apetito, la negación a comer, la pérdida de peso y la deterioración física. Para evitar problemas generados por la mala alimentación es importante guiarlos con firmeza.
El cuidador debe establecer horarios para las comidas y además simplificar el acto de comer, ya sea respecto al espacio y a los utensilios utilizados. También es importante esconder los alimentos no permitidos y consultar con el médico ante cualquier eventualidad. El cuidador también debe recordar controlar el peso de la persona con demencia de forma regular para estar atento a los cambios.
Las personas con Alzheimer también pueden sufrir de trastornos en su comportamiento y en el manejo de la sexualidad, por ello es importante contar con un cuidador que esté capacitado para manejar cualquier tipo de situación que se presente fuera de lo normal